La Ratonera
Para que escuchen «La Ratonera» aquí el MP3 y la letra de una de las canciones más populares de nuestro amigo Florcita Motuda, cantautor humanista.
Para que escuchen «La Ratonera» aquí el MP3 y la letra de una de las canciones más populares de nuestro amigo Florcita Motuda, cantautor humanista.
Este sábado 19 hicimos la primera reunión en mi casa y realizamos este taller, fue una reunión muy buena invito a que inviten a sus amigos… todos los sábados a las 3pm no reunimos en mi casa. Aquí, le dejo el material de la reunión, recuerden la tarea!
El Festival Acostado en una cama, creo estar en la habitación de un hospital. Escucho apenas, el goteo de un grifo de agua mal cerrado. Intento mover los miembros y la cabeza, pero no me responden. Con esfuerzo, mantengo los párpados abiertos. Me parece que alguien ha dicho a mi lado, que afortunadamente salí de
El Viaje Sigo subiendo a pie por el camino montañoso. Me detengo un instante y miro hacia atrás. A la distancia, veo la línea de un río y lo que podría ser una arboleda. Más lejos, un desierto rojizo que se pierde en la bruma del atardecer. Camino unos pasos más, mientras la senda se
La Repetición Es de noche. Camino por un lugar débilmente iluminado. Es un callejón estrecho. No veo a nadie. En todo caso, la bruma difunde una luz distante. Mis pasos resuenan con un ominoso eco. Apuro el andar con la intención de llegar al próximo farol. Llegando al punto, observo una silueta humana. La figura
Las Falsas Esperanzas He llegado al lugar que me recomendaron. Estoy frente a la casa del doctor. Una pequeña placa advierte: «Usted que entra, deje toda esperanza.» Después de mi llamada, se abre la puerta y una enfermera me hace pasar. Señala una silla en la que me siento. Ella se sitúa tras una mesa,
La Acción Salvadora Nos desplazamos velozmente por una gran carretera. A mi lado, conduce una persona que no he visto nunca. En los asientos traseros, dos mujeres y un hombre, también desconocidos. El coche corre rodeado por otros vehículos que se mueven imprudentemente, como si sus conductores estuviesen ebrios o enloquecidos. No estoy seguro si
La Protectora de la Vida Floto de espaldas en un lago. La temperatura es muy agradable. Sin esfuerzo, puedo mirar a ambos lados de mi cuerpo, descubriendo que el agua cristalina me permite ver el fondo. El cielo es de un azul luminoso. Muy cerca hay una playa de arenas suaves, casi blancas. Es un
El Resentimiento Es de noche. Estoy en una antigua ciudad surcada por canales de agua que pasan bajo los puentes de las calles. Acodado en una balaustrada, miro hacia abajo el lento desplazamiento de una líquida y turbia masa. A pesar de la bruma, alcanzo a ver sobre otro puente, un grupo de personas. Apenas
La Pareja Ideal Caminando por un espacio abierto, destinado a exposiciones industriales, veo galpones y maquinaria. Hay muchos niños a los que se ha destinado juegos mecánicos de alta tecnología. Me acerco hasta un gigante hecho de material sólido. Está de pié. Tiene una gran cabeza pintada en colores vivos. Una escalera llega hasta su
La Nostalgia Las luces coloreadas destellan al ritmo de la música. Tengo al frente a quien fue mi gran amor. Bailamos lentamente y cada flash me muestra un detalle de su rostro o de su cuerpo. ¿Qué falló entre nosotros? Tal vez el dinero. Tal vez aquellas otras relaciones. Tal vez aspiraciones diferentes. Tal vez
El Gran Error Estoy de pie frente a una especie de Tribunal. La sala, repleta de gente, permanece en silencio. Por todas partes veo rostros severos. Cortando la tremenda tensión acumulada en la concurrencia, el Secretario (ajustando sus gafas), toma un papel y anuncia solemnemente: «Este Tribunal, condena al acusado a la pena de muerte».